Historia en Breve
• El agua alcalina es un tipo de agua que es separada en fracciones alcalinas y ácidas por medio del proceso de electrólisis
• Muchos promotores y comerciantes afirman que el agua alcalina puede corregir el exceso de acidez en los tejidos, lo cual podría prevenir o revertir el cáncer, artritis y otras enfermedades degenerativas, pero esas afirmaciones no se encuentran respaldadas por la ciencia
• Cuanto más alto es el pH, hay menos iones de hidrógeno libre (H+); y cuanto más bajo es el pH, hay más iones de hidrógeno libre (H+)
• Los iones de hidrógeno no deben confundirse con gas de hidrógeno molecular (gas de H2). El hidrógeno molecular es un gas con efectos antioxidantes muy exclusivos y selectivos que son dirigidos específicamente hacia los radicales libres dañinos
• La moda del agua alcalina fue una desafortunada consecuencia del exitoso uso del agua hidrogenada, basado en un malentendido o ignorancia acerca de la propiedad terapéutica del agua (por ejemplo, los beneficios falsamente atribuidos al pH alcalino y no al gas de H2)
Por el Dr. Mercola
Ahora, el agua alcalina ha experimentado de nuevo un auge en popularidad, ya que las ventas se han incrementado de 47 millones de dólares en 2014 a 427 millones de dólares en 2017.1 Los vendedores afirman que el agua alcalina puede corregir el exceso de acidez en los tejidos, lo que podría prevenir o revertir el cáncer, artritis y otras enfermedades degenerativas.2
Sin embargo, prácticamente no existen pruebas sólidas que apoyen tales afirmaciones, y hace más de ocho años les advertí a las personas de forma constante sobre la cuestión de beber agua alcalina. Por otro lado, el hidrógeno molecular puede proporcionar un sin número de beneficios para la salud, algunos reflejan las afirmaciones sobre el agua alcalina… y existe una muy buena razón.
Por consiguiente, en este artículo abordaré estos dos tipos de agua y la evidencia científica (o falta de) que sustenta su uso, y cómo los beneficios del hidrógeno molecular fueron conferidos inapropiadamente al agua alcalina, principalmente debido a la ignorancia.
¿Qué es el agua alcalina?
El agua alcalina es un tipo de agua que ha pasado por un proceso de electrólisis que la separa en fracciones alcalinas y ácidas. La teoría detrás del agua alcalina es que el agua alcalina (ionizada) es un poderoso antioxidante con excedente de electrones que pueden “eliminar” a los peligrosos radicales libres. Según informó Arwa Mahdawi para el diario británico The Guardian:3
“El Dr. Tanis Fenton, profesor adjunto de University of Calgary y analista de evidencia para Dietitians of Canada, me dijo que las declaraciones publicitarias detrás del agua alcalina se basaban en una idea obsoleta llamada la hipótesis de ceniza ácida.
Esto sugiere que consumir ciertos alimentos como carne, lácteos y huevos pueden producir algo en el cuerpo llamado ceniza ácida, lo cual podría incrementar los niveles de ácido y causar efectos adversos para la salud, incluyendo osteoporosis.
En 2002, un practicante de medicina alternativa llamado Robert O Young4 convirtió la hipótesis de ceniza ácida en una dieta alcalina novedosa, con una popular serie de libros llamados pH Miracle.
De acuerdo con estos libros, la dieta alcalina podría tratar todo tipo de padecimientos, desde la mala digestión hasta el cáncer. Como comentario adicional, Young fue sentenciado a tres años de cárcel por practicar medicina sin licencia en 2017”.
Según Fenton —autor de una revisión sistemática5 de la relación entre el agua alcalina y cáncer— los pocos estudios que demuestran resultados positivos del agua alcalina están mal diseñados, lo que lo llevó a la conclusión de que “no existen pruebas rigurosas” que demuestren que el agua alcalina proporcione beneficios para la salud.
Randy Johnson también comparte su punto de vista6 —quien tiene una maestría en genética molecular— cuya evaluación de la evidencia se puede encontrar en su página web “Cyber Nook — Drinking Water Resources: A Review of the Evidence Alleged to Support Health Benefits of Alkaline Water”.7
¿Por qué el agua alcalina realmente no proporciona beneficios?
Una de las razones principales por las que el agua alcalina no puede proveer los beneficios relacionados con la alcalinidad es porque no puede alterar de esa forma el pH de la sangre y el cuerpo. Como señaló Fenton:8
“El cuerpo tiene un rango muy limitado para regular el pH [sanguíneo] porque todas nuestras enzimas están diseñadas para funcionar a un pH de 7.4. Si nuestro pH variara demasiado, no sobreviviríamos”.
Sin embargo, su alimentación —incluyendo el agua que bebe— puede alterar el pH de su orina. Por lo general, la orina es ácida y tiene un pH alrededor de 6, que de hecho es una señal de que sus riñones funcionan correctamente.
En cuanto a los beneficios informados por las personas que beben agua alcalina, Fenton sugiere que podrían ser causados por un efecto placebo. Además, la mejora inicial podría atribuirse a una mejor hidratación o desintoxicación general, simplemente por beber más agua. Por último, el agua alcalina frecuentemente se relaciona con tener una concentración mineral más alta, lo que por ende ofrece conocidos efectos beneficiosos, particularmente cuando la ingesta alimentaria a través de alimentos es baja.9
Pero ¿qué es el pH?
El concepto de la acidez o alcalinidad del cuerpo —o agua— se basa en la escala de pH. ¿Qué es el pH? Simplemente, se trata de una medida en la concentración de iones de hidrógeno.10 De hecho, el acrónimo “pH” es la abreviatura de “potencial de hidrógeno”.
Cuanto más alto es el pH de un líquido, contiene menos iones de hidrógeno libre (H+); y cuanto más bajo es el pH, hay más iones de hidrógeno libre (H+). Una unidad de pH refleja un cambio de diez veces en la concentración de iones, por lo que hay diez veces más iones de hidrógeno disponibles en un pH de 7 que a un pH de 8.11
La escala de pH varía de 0 a 14, y un pH de 7 es neutro. Cualquier materia con un pH inferior a 7 se considera ácida, y cualquiera con un pH superior a 7 es alcalina (o básica).12
Pero la verdadera razón por la que el agua alcalina es una estafa es porque no cuenta con un sistema tampón (buffer, en inglés) para mantener el pH.
En el instante en que el agua alcalina llega el entorno tan ácido del estómago, el pH se neutraliza, ya que no cuenta con estos agentes reguladores. El agua verdaderamente alcalina debería contar con un buffer alcalino, como el bicarbonato de sodio, que también es el buffer alcalino natural de nuestro cuerpo.
Algunas personas han declarado que el ácido del estómago es el que neutraliza el agua alcalina, los iones de bicarbonato se liberan en la sangre y, por tanto, tiene un efecto alcalinizante. Esto sería cierto si el agua alcalina neutralizara efectivamente todo el ácido estomacal (como lo haría el bicarbonato de sodio), pero el agua alcalina no neutraliza ninguna cantidad significativa de ácido estomacal. El ácido estomacal neutraliza completamente el agua alcalina. Así que no se da un “efecto alcalinizante neto”.
El agua natural en nuestro planeta tiene un pH de 6.5 a 8.5, en función del suelo y vegetación circundante, variaciones estacionales y clima, e incluso la respuesta a la luz solar durante el día. Las actividades humanas influyen aún más en el pH del agua, debido a la descarga de contaminantes industriales tóxicos.
La mayoría de los animales y plantas acuáticas se encuentran tan adaptados a la vida en el agua con un pH muy específico, que incluso morirían si hubiera leves cambios.
Por ejemplo, la Universidad Estatal de Michigan descubrió que cuando el pH de los materiales de invernadero era demasiado alto (superior a 6.5), incrementaba la posibilidad de deficiencia de micronutrientes en las plantas, y un pH bajo (menos de 5.3) podría ocasionar toxicidad por manganeso, magnesio o calcio.13
De igual forma, el Servicio de Extensión de la Universidad Estatal de Ohio informó que el agua alcalina podría afectar la capacidad de una planta para obtener nutrientes del suelo, y con el tiempo, alterar el pH del suelo.14
Además, el cuerpo requiere un pH relativamente estable, o de lo contrario puede causar problemas; lo cual fue demostrado en un estudio sobre agua de pozo realizado en Suecia,15 que encontró que ambos extremos del pH eran problemáticos.
En particular, el pH parece ejercer una gran influencia en las mitocondrias.16 La investigación ha demostrado que las células normales pueden morir en condiciones extremadamente alcalinas, como resultado de la alteración de la función mitocondrial.17
Entonces, como señala Fenton, “el agua alcalina es una solución a un problema que no necesita solución”. De hecho, es lógico que esté diseñado para beber agua que se produce de forma natural, lo que excluye al agua alcalina con niveles de pH de 9.5 y superiores.
El inicio de la producción de agua hidrogenada aclara el mito del agua alcalina
Lo curioso es que, aparte de que Young toma la hipótesis de ceniza ácida y continúa estudiándola, hay otra pieza de la historia que ayuda a explicar por qué se impuso el mito del agua alcalina.
El Molecular Hydrogen Institute explica la historia del agua electrolizada reducida o ERW (término usado comúnmente para referirse al agua alcalina en la literatura científica):18
“Los estudios sobre el ERW iniciaron en Japón en la década de los años 30. En 1965, el ministro japonés de salud, trabajo y bienestar aprobó el ERW como una sustancia medicinal con potencial para mejorar los síntomas gastrointestinales…
Durante las décadas posteriores, se acumuló evidencia anecdótica y científica comprobando muchos otros beneficios del ERW como: proteger el ADN del daño causado por radicales libres, aumentar la absorción de glucosa, mejorar la diabetes, prevenir la muerte celular prematura, ofrecer protección al hígado, prevenir la oxidación de los lípidos, entre otros.
Sin embargo, era incierto cómo el EWR producía estos beneficios”.
Desafortunadamente, así fue que inició el malentendido del pH. Pero, como lo resalta el Molecular Hydrogen Insitute, “ahora se reconoce que el agente primario responsable de los beneficios se debe al gas de hidrógeno molecular diluido”.
Así que, en resumen, los numerosos beneficios se deben a la presencia del hidrógeno molecular y no tienen nada que ver con el pH del agua.
El Dr. Kyu-Jae Lee, un investigador del gas de hidrógeno, dice:19
“En la década de los 90 inicié mis estudios sobre el agua alcalina ionizada y publiqué artículos científicos sobre sus efectos antioxidantes, anticancerígenos y antidiabéticos, pero en ese entonces no entendía realmente por qué esta agua funcionaba. Ahora he confirmado que los beneficios del agua alcalina ionizada se atribuyen al gas de hidrógeno producido durante la electrólisis”.
Otra investigadora, Mami Noda, Ph. D., añade:20
“Al realizar pruebas en todas las variables de agua (p. ej., minerales, pH, H2, etc.), es claro que solo el H2 ofrece los beneficios… Nuestra publicación de 2009 sobre un modelo para la enfermedad de Parkinson en una rata con MPTP inducido, también demuestra los efectos beneficiosos del H2.
Después descubrimos que los beneficios de este modelo se producían mediante la secreción gástrica de grelina inducida con H2 vía una secuencia receptora-dependiente adrenérgica ß1. Aunque el efecto del hidrógeno en la enfermedad de Parkinson no se ha confirmado en una prueba clínica con humanos, se necesitan realizar más investigaciones para revelar los mecanismos moleculares responsables de los beneficios terapéuticos del H2.
Debido al perfil muy alto de seguridad del hidrógeno, su facilidad de administración y sus efectos medicinales promisorios, me siento obligada como farmacóloga a continuar mis investigaciones del H2 como un gas medicinal innovador”.
¿Qué es el hidrógeno molecular?
El hidrógeno molecular (H2) —dos átomos de hidrógeno combinados— es un gas que genera efectos antioxidantes únicos y selectivos que se focalizan específicamente en los radicales libres más dañinos. Su función principal es mejorar y optimizar el estado redox (reducción-oxidación) de la célula, cuando es necesario.
Como resultado se observan mejoras, por ejemplo, en los niveles de superóxido dismutasa, catalasa y glutatión. El hidrógeno no solo puede reducir selectivamente los radicales más tóxicos, sino que también, en primer lugar, puede ayudar a evitar que se produzca una cantidad excesiva (que se vuelve tóxica) de radicales libres. Este es un mecanismo de prevención muy poderoso.
Además, cuando es requerido, el H2 activa la vía Nrf2, la cual es un factor de transcripción que, cuando se activa, entra en el núcleo de la célula y se une al elemento de respuesta antioxidante en el ADN. Luego, induce la transcripción de otras enzimas citoprotectoras como glutatión, superóxido dismutasa, catalasa, glutatión peroxidasa, enzimas de fase II, hemo oxigenasa-1 y muchas otras.
En 2007, se publicó un artículo referente21 sobre el hidrógeno molecular en la revista Nature Medicine, que demostraba que el 2 % del gas hidrógeno era eficaz para prevenir el daño cerebral causado por la reperfusión de la isquemia y que, como antioxidante, tenía poderosas aplicaciones terapéuticas.
El hidrógeno es la molécula más pequeña del universo, es neutral y no polar, por lo que cuenta con una amplia biodisponibilidad. Cuando se disuelve en agua no se disocia en sus electrones y protones, por lo que no alterará el pH del agua o el cuerpo, y no está relacionado con el concepto de agua alcalina.
Más de 1000 publicaciones científicas revisadas por pares han demostrado en conjunto que el H2 ha demostrado un potencial terapéutico en más de 170 modelos diferentes de enfermedades humanas y animales.
De hecho, se ha demostrado que el hidrógeno podría beneficiar a prácticamente todos los órganos del cuerpo humano, ya que en realidad focaliza y mitiga las causas de la inflamación y oxidación.
Para saber más detalles sobre cómo funciona el hidrógeno molecular, puede consultar mi artículo “Los excepcionales beneficios del hidrógeno molecular”,22 en el que entrevisté a un experto e investigador reconocido internacionalmente en este campo, Tyler W. LeBaron.
Agua hidrogenada versus peróxido de hidrógeno
Debido a la similitud en sus denominaciones, muchas personas confunden el agua hidrogenada con el peróxido de hidrógeno (H2O2), y a menudo me preguntan si se pueden obtener los beneficios del hidrógeno molecular al beber el peróxido de hidrógeno a través del agua. Pero, ese podría ser un peligroso error, así que aclararé el punto:
Nunca debe ingerir peróxido de hidrógeno (solución al 3 %)
El peróxido de hidrógeno (solución al 3 %) —es el material que se utiliza para desinfectar heridas— no es lo mismo que el hidrógeno molecular o agua hidrogenada (H2). El peróxido de hidrógeno solo es para uso tópico.
Podría utilizarlo como enjuague bucal para la gingivitis, siempre que lo no lo trague, y puede poner algunas gotas en el canal auditivo, como remedio para combatir los síntomas del resfriado y la gripe, pero nunca debe consumir el peróxido de hidrógeno.
Otro típico error es creer que añadir hidrógeno en el agua podría formar peróxido de hidrógeno. Según expuso el Molecular Hydrogen Institute:23
“La fórmula química del agua es H2O, y la fórmula química del peróxido de hidrógeno es H2O2, que en comparación contiene un oxígeno adicional, no un hidrógeno. Por lo tanto, no forma, ni puede formar peróxido de hidrógeno.
El hecho es que el gas hidrógeno no se une ni reacciona con las moléculas de agua, solo se disuelve en el agua. No crea una molécula nueva como H4O, que de hecho sería químicamente imposible de formar.
Por lo tanto, el agua hidrogenada y peróxido de hidrógeno son sustancias completamente diferentes. Además, el peróxido de hidrógeno no se puede utilizar para generar gas de H2 o crear agua enriquecida con hidrógeno”.
Alcalino versus alcalinidad
Otra fuente de confusión es el problema de las diferencias entre los conceptos ‘alcalino’ y ‘alcalinidad’.
Desde el punto de vista científico, no son intercambiables, ya que se refieren a cuestiones diferentes; lo cual también podría ser en parte el motivo por el que las personas le han otorgado un valor indebido al agua alcalina. Como explicó Mark Timmons, presidente ejecutivo de US Water Systems:24
“Alcalizar el cuerpo significa que le provee la capacidad de mantener un pH adecuado, pero para hacerlo necesita agua con alcalinidad, y no agua alcalina. Simplemente, el pH mide el grado de acidez o alcalinidad, no la capacidad de neutralizar el ácido… Tampoco se alcaliniza el cuerpo con base en el pH, sino con la alcalinidad.
La alcalinidad mide la capacidad para neutralizar el ácido con buffers que son la suma de los bicarbonatos. La alcalinidad se mide en mg/l (miligramos por litro).
Los compuestos minerales alcalinos incluyen… al calcio, potasio, magnesio, sodio, manganeso [y] hierro. Por lo tanto, debe agregar alcalinidad al cuerpo, pero debe entender que el pH no está relacionado con esa alcalinidad.
Un ejemplo concreto sería, el jugo de espinaca tiene un pH de 6.4 pero una alcalinidad de 2250 mg/l… Si agrega 1/2 cucharadita de bicarbonato de sodio en un vaso de agua, obtendría una alcalinidad de 1500 mg/l.
Si lo compara con uno de los múltiples filtros alcalinos en el mercado, la mayoría añade unos cuantos mg/l de alcalinidad y luego esos niveles solo pueden mantenerse en algunos galones”.
La poca factibilidad del agua alcalina como medida preventiva contra el cáncer
Uno de los supuestos beneficios de beber agua alcalina es prevenir el cáncer. Sin embargo, de hecho, gran parte de la investigación argumenta en contra de la alcalinidad como tratamiento anticancerígeno.
Según Robert Gilles, quien ha estudiado formación de tumores y acidez,25 los tumores producen su propia acidez de forma natural, e incluso lo hacen en una estructura celular alcalina.
Los científicos que desarrollan prototipos de agentes anticancerígenos que matan selectivamente las células tumorales al interferir con la regulación del pH intracelular, también informan que los tratamientos alcalinos no exhiben el efecto deseado, ¡al contrario de los tratamientos muy ácidos!26
Y aún más interesante es que, un estudio realizado por el Instituto Nacional del Cáncer en 2005,27 que reexaminó el uso de la vitamina C (ácido ascórbico) para tratar el cáncer, encontró que en dosis farmacológicas administradas por vía intravenosa, el ácido ascórbico destruía exitosamente las células cancerígenas sin dañar las células normales.
Este es otro ejemplo de que las células cancerígenas son vulnerables a la acidez, contrapuesto a la alcalinidad. Por lo tanto, parece evidente que la relación entre la alcalinidad y el cáncer ha sido muy simplificada por quienes hacen conclusiones prematuras.
El hidrógeno molecular —y no el pH alto— es muy beneficioso para su salud
En resumen, es poco probable que beber agua alcalina le aporte tantos beneficios; así que es posible que desperdicie su inversión. Por otro lado, cuando el agua hidrogenada es consumida diariamente, podría proporcionar muchos beneficios; incluso la consumo regularmente.
Para obtener más detalles sobre el hidrógeno molecular, sus acciones, potencial terapéutico e información sobre cómo asegurarse de obtener un producto de calidad, lea mi artículo en el que hablo con LeBaron.
Los excepcionales beneficios del hidrógeno molecular
El hidrógeno molecular (H2) es un gas con efectos antioxidantes muy particulares y selectivos. Funciona principalmente al mejorar el estado redox de la célula cuando es necesario
El hidrógeno es la molécula más pequeña del universo y por esa razón tiene gran biodisponibilidad. También es neutral, por lo que puede penetrar fácilmente cualquier espacio de las membranas de su cuerpo
Hay más de 1000 publicaciones sobre el hidrógeno molecular que demuestran su potencial terapéutico sobre más de 170 modelos de diferentes enfermedades humanas y animales
Se ha demostrado que el hidrógeno beneficia a todos los órganos del cuerpo humano, al reducir de manera efectiva el estrés oxidativo e inflamación
Hay varias formas de administrar hidrógeno, incluida la inhalación de gas de hidrógeno, beber y/o bañarse en agua hidrogenada, inyección intravenosa de solución salina rica en hidrógeno y terapia hiperbárica con hidrógeno
Por el Dr. Mercola
El hidrógeno molecular es un gas con efectos antioxidantes muy particulares y selectivos.1
Tyler W. LeBaron es un experto de clase mundial en el hidrógeno molecular, que realizó una investigación en la Universidad de Nagoya en Japón, donde comenzó la mayor parte de su investigación. Es director ejecutivo del Molecular Hydrogen Institute (MHI), que es una organización sin fines de lucro y con base científica en virtud de la Sección 501(c)(3).
El MHI se centra en promover la investigación, aprendizaje y conocimiento del hidrógeno como un gas terapéutico medicinal.
También es director de varias otras organizaciones sin fines de lucro, incluida la International Hydrogen Standards Association (IHSA), que actualmente está creando normas bajo los criterios ISO para la medición del gas de hidrógeno.
La razón por la que probablemente no haya oído hablar del hidrógeno molecular es porque es relativamente nuevo. Un artículo precursor fue publicado en la revista de medicina Nature Medicine hace 10 años (2007) y la mayor parte de la investigación se ha realizado en Asia.
Guía básica sobre el hidrógeno molecular
El hidrógeno molecular se refiere al hidrógeno diatómico o gas H2: dos átomos de hidrógeno combinados. El hidrógeno es la molécula más pequeña del universo, es neutral y no polar, razón por la que tiene gran biodisponibilidad.
No se disocia de sus electrones y protones cuando se disuelve en agua, por lo que no alterará el pH del agua o de su cuerpo y no tiene relación alguna con el concepto de agua alcalina.
“Solo es gas de hidrógeno. Tiene tres veces más contenido energético que la gasolina. Por eso se considera una fuente de energía alternativa o combustible”, indica LeBaron. “Es lo que alimenta al sol y se fusiona para la producción de helio.
Hablamos de hidrógeno y estamos viendo que también puede ser terapéutico, [y] es efectivo si lo inhala, bebe disuelto en agua o utiliza mediante otros métodos de administración.
En 2009, me encontré un artículo publicado en Nature Medicine2 [del 2007]… [que] demostraba que [el 2 %] del [gas] de hidrógeno había sido eficaz para prevenir el daño cerebral causado por la reperfusión isquémica inducida por una oclusión de la arteria cerebral media en un modelo de rata…
Me estaba graduando en bioquímica en ese entonces, pero siempre me ha interesado la salud…
Partí desde ahí y leí toda la investigación y bibliografía al respecto, y continué avanzando en el área, posteriormente fui a Japón. Ahora puedo trabajar y colaborar con algunos de los mejores investigadores en el mundo sobre el tema. Me siento muy afortunado de estar involucrado en esta área emergente sobre el hidrógeno gaseoso”.
El hidrógeno molecular tiene efectos antioxidantes particulares y selectivos
El hidrógeno molecular compensa el estrés oxidativo, que es uno de los mecanismos más fundamentales que perjudican la salud humana. Por ese motivo el hidrógeno molecular es tan increíble; porque tiene efectos antioxidantes tan únicos que abordan los radicales libres más dañinos de manera específica.
Ahora bien, aunque podría pensar que el gas de hidrógeno se disocia o neutraliza los radicales libres de hidroxilo (que causan el mayor daño oxidativo), parece ser que no funciona de esa manera.
Hay más de 1000 publicaciones científicas sobre el hidrógeno molecular revisadas por expertos, que han demostrado en conjunto que el H2 tiene potencial terapéutico sobre más de 170 modelos de diferentes enfermedades humanas y animales.
De hecho, se ha demostrado que el hidrógeno beneficia prácticamente a todos los órganos del cuerpo humano. La razón es porque el hidrógeno aborda y mitiga la causa subyacente de muchas enfermedades, es decir, la inflamación y oxidación. Pero ¿cómo lo hace? LeBaron explica:
“Para entender cómo funciona el hidrógeno, necesitamos entender cómo funcionan los radicales libres y por qué se producen. Primero, el cuerpo produce el radical hidroxilo, que es OH neutro con un electrón par único, a través de la reacción de Fenton.
Cuando los radicales libres llegan a niveles demasiado altos, como los de superóxido, peroxinitritos [o] la radiación ionizante,3 se pueden convertir en radicales hidroxilo… [Los radicales hidroxilo] son dañinos porque son muy reactivos…
En el caso de otros radicales libres [como] el óxido nítrico, un radical libre muy importante que provoca la vasodilatación, no buscamos neutralizarlo. Tenemos radicales superóxido [y] otros oxidantes como el peróxido de hidrógeno—los cuales son muy importantes.
Por supuesto, el exceso es malo, pero tenerlos en las concentraciones correctas y en los lugares correctos es muy beneficioso. No solo queremos neutralizarlos a todos, considerando que no queremos ningún radical de hidroxilo u oxidantes de peroxinitrito.
Esa publicación de Nature Medicine demostró de forma específica que el hidrógeno podría actuar como un antioxidante terapéutico al reducir los radicales de oxígeno citotóxico, de manera selectiva, en especial al radical hidroxilo y, en menor medida, al peroxinitrito, sin disminuir los otros oxidantes como el peróxido de hidrógeno o superóxido…
La mayoría de los demás antioxidantes no son selectivos… [y] eso puede ser un problema… El hidrógeno es selectivo en el sentido de que solo disminuirá o reducirá los radicales tóxicos como el radical hidroxilo”.4
Cómo funciona el hidrógeno molecular
Hay dos definiciones básicas de un antioxidante: 1) una molécula que dona un electrón a una reacción radical, y 2) una molécula que mejora el estado redox de la célula. Ramificaciones redox para la reducción de la oxidación. En sus células, necesita tanto la oxidación como una reducción de la oxidación para que todo funcione de manera apropiada.
Cuando ese equilibrio es alterado por demasiada oxidación, obtiene estrés oxidativo. Si no tiene suficiente oxidación, desarrollará otros serios problemas. En muchos casos, el daño no es causado por un exceso de radicales libres, sino más bien por una desregulación del estado redox.
“Necesitamos radicales libres”, indica LeBaron, “y los estudios han demostrado que en realidad puede sufrir demasiado estrés oxidativo y demasiado estrés reductivo5 (o no tener suficiente potencial oxidativo) no solo en el mismo cuerpo o mismo órgano, sino en la misma célula.
Con demasiado estrés oxidativo en el citosol no hay suficiente poder oxidativo en el retículo endoplásmico. El hidrógeno ayuda a regresar todo a la homeostasis”.
Entonces, aunque que el hidrógeno tiene efectos antioxidantes, funciona principalmente al mejorar el estado redox de la célula cuando es necesario. Como resultado, experimenta mejoras en los niveles de superóxido dismutasa y glutatión, por ejemplo.
El hidrógeno no solo reduce los radicales más tóxicos de forma selectiva, sino que también puede ayudar a evitar que se produzca un exceso (que se vuelve tóxico) de radicales libres en primer lugar. Este es un mecanismo de prevención muy poderoso.
Otra forma es activar la vía Nrf2 cuando sea necesario. El Nrf2 es un factor de transcripción que, cuando se activa, ingresa al núcleo de la célula y se une al elemento de respuesta antioxidante en el ADN.
Luego induce la transcripción de otras enzimas citoprotectoras como el glutatión, superóxido dismutasa, catalasa, glutatión peroxidasa, enzimas de la fase II, la hemo oxigenasa 1 y muchos otros.
“Un estudio6,7 [que analiza] el síndrome metabólico encontró que los participantes que bebieron agua enriquecida con hidrógeno tuvieron un aumento del 39 % en la superóxido dismutasa extracelular.
Entonces, sí, el hidrógeno tiene este efecto antioxidante, ya que puede ayudar a regular la vía Nrf28 y regresar las enzimas y proteínas citoprotectoras a los niveles que se supone que deben estar; de vuelta al reino de la homeostasis”.
El consumo cíclico es clave para obtener una eficacia óptima
Dependiendo de la persona y su alimentación, las bacterias intestinales que fermentan la fibra producen aproximadamente 2.5 galones de hidrógeno gaseoso al día,9,10 lo que forma parte de los beneficios terapéuticos de la fibra. Desde una perspectiva evolutiva, siempre hemos estado expuestos al gas de hidrógeno.11,12
Estos datos por sí solos son indicios de su seguridad. “Cualquiera puede consumirlo: mujeres embarazadas, niños, todas las personas. El gas de hidrógeno es muy seguro en sí mismo. Desde la década de 1940 se ha utilizado para el buceo en aguas profundas con el fin de prevenir el síndrome de descompresión”,13 dice LeBaron.
(Normalmente, se usa helio, pero para inmersiones muy profundas, se emplea gas de hidrógeno, como el hydrox, que es 96 % hidrógeno).
Ahora bien, si el gas de hidrógeno es tan beneficioso, y su cuerpo ya produce una gran cantidad del mismo, ¿por qué consumir agua rica en hidrógeno seguiría siendo terapéutico, si se obtienen cantidades mucho menores de hidrógeno de esta manera?
Curiosamente, un estudio de la Universidad de Nagoya14 demostró que, si bien la administración continua de hidrógeno en el aire no era efectiva para prevenir la enfermedad de Parkinson, la exposición intermitente sí lo era. Sin embargo, los mejores efectos se obtuvieron al beber agua rica en hidrógeno.
¿Qué hay en la exposición cíclica o intermitente (en comparación con la continua) que hace una gran diferencia? LeBaron explica:
“Parece ser más como un modulador de señal gaseosa. La forma en que funciona un modulador de señal es que debe tener este tipo de exposición de forma intermitente, o de lo contrario se habituará y como consecuencia la señal se atenuará.
Eso es lo que observamos con el gas de hidrógeno… modula la expresión génica, fosforilación de proteínas y muchos factores de transcripción, pero los objetivos principales siguen siendo difíciles de alcanzar.
Clínicamente, el hidrógeno molecular también ha demostrado ofrecer excelentes beneficios. Siempre hace falta más investigación, pero hay algunos estudios sólidos que demuestran su seguridad y eficacia.
[En un estudio15] incluyeron a 50 pacientes con infarto cerebral; 25 [recibieron] hidrógeno por inhalación y 25 en el grupo de control [recibieron] un medicamento médico aprobado… [E]l hidrógeno fue significativamente más efectivo que el medicamento en todos los parámetros medidos, sin efectos secundarios.
Reitero, la razón por la que me apasiona tanto el hidrógeno es porque es una molécula simple, segura, fácil de administrar y, realmente, tiene un potencial terapéutico muy importante.
Solo hubo otro estudio publicado sobre… la enfermedad de Alzheimer. Si observamos el genoma, aquellos con el genotipo APOE4 son susceptibles a la enfermedad de Alzheimer…
Cuando observamos los efectos de beber agua rica en hidrógeno… se descubrió que fue considerablemente terapéutica ante esta enfermedad. Esto es importante porque no hay medicamentos aprobados que sean efectivos para la enfermedad de Alzheimer”.
El hidrógeno molecular imita los efectos del ayuno
Es interesante señalar que existe evidencia que sugiere que si tiene el gen APOE4, realmente necesita practicar el ayuno intermitente para evitar desarrollar la enfermedad de Alzheimer, y una de las vías que el hidrógeno parece imitar es la del ayuno.
El Dr. Dale Bredesen ahonda sobre esto en su libro titulado The End of Alzheimer’s (El fin de la enfermedad de Alzheimer), y también en mi artículo anterior: “ReCODE: La Reversión del Deterioro Cognitivo”.
LeBaron cita un estudio publicado en Journal of Obesity, que básicamente demuestra que beber agua rica en hidrógeno tuvo el mismo efecto en cerca de un 20 % que la restricción de calorías.
Además, tanto el ayuno como el hidrógeno molecular aumentan la secreción neuroprotectora de grelina gástrica, una hormona del hambre, y en al menos un estudio, se demostró ser uno de los principales mediadores que benefician a las personas con enfermedad de Parkinson.16,17,18
Usos del hidrógeno para la diabetes
Los estudios clínicos también han demostrado que el hidrógeno molecular previene eficazmente el daño hepático (hígado graso) causado por una alimentación con alto contenido de azúcar y síndrome metabólico.19,20
“En algunos de los estudios sobre el síndrome metabólico, los niveles de glucosa en ciertas personas con tolerancia a la glucosa disminuyeron al rango normal”, señala LeBaron.
La investigación con animales21 sugiere que el hidrógeno podría inducir la translocación de GLUT4 por un mecanismo similar al de la insulina.
“Necesitamos más estudios para analizar esto, pero algunos de estos datos preliminares realmente demuestran que es excelente para ciertas personas con diabetes”,22 afirma.
También hay algunas pruebas23,24,25,26 que pueden ayudar a suprimir el desarrollo del cáncer como tratamiento complementario y reducir la toxicidad de los medicamentos contra el cáncer,27 sin embargo, LeBaron es cauteloso respecto a esto e indica que se necesitan más estudios.
Terapias de hidrógeno disponibles
Hay varias formas de administrar hidrógeno. Por ejemplo, puede inhalar gas de hidrógeno, y para esto, hay máquinas de inhalación disponibles en el mercado. Sin embargo, se requiere precaución.
El gas producido en el cátodo es gas de hidrógeno, pero si los electrodos son impuros o desarrollan acumulación de minerales y el agua que está usando tiene cloruro, se puede producir gas de cloro, que terminará inhalando.
Otros métodos son beber y/o bañarse en agua rica en hidrógeno, y hay varias maneras de hacerlo. Por ejemplo, puede hacer burbujas en el agua directamente del tanque de gas hidrógeno y disolverlo bajo presión.
Solo tenga en cuenta que, si planea almacenarlo, no puede usar recipientes de plástico, ya que las moléculas de hidrógeno son tan pequeñas que se disiparán a través del recipiente.
Para mayor claridad, el gas de hidrógeno solo son dos átomos de hidrógeno unidos entre sí. Al disolverse en agua, no se unirá a las moléculas de agua, por lo que no hay riesgo de que se vaya a crear otra estructura. También existen inyecciones intravenosas de solución salina rica en hidrógeno y terapia de hidrógeno hiperbárico que se desarrollaron en Japón.
Cómo medir la concentración del gas de hidrógeno
Una forma de evaluar la calidad de su producto de hidrógeno molecular es usar un reactivo de titulación redox llamado H2 Blue. Que se encuentra disponible en varios sitios web distintos, incluido Amazon.
Esto le permite medir la concentración de hidrógeno en el agua que está a punto de beber. Para hacerlo, solo llene el pequeño vaso de precipitado con 6 mililitros de su agua de hidrógeno. Si no contiene gas hidrógeno, el reactivo azul permanecerá azul.
Si hay gas hidrógeno presente, el reactivo cambiará de azul a transparente. Una vez que se aclare, agregue otra gota del reactivo. Continúe agregando gota por gota hasta que la solución se vuelva azul y permanezca azul. Esto se llama punto final de valoración. Únicamente cuente cuántas gotas se necesitaron para lograrlo.
Cada gota equivale a aproximadamente 0.1 miligramos por litro y el número de gotas requeridas para neutralizar la solución de prueba determinará la concentración de hidrógeno molecular. Entonces, si tuviera que agregar 10 gotas, tendría 1 miligramo de hidrógeno por litro.
Dosis terapéuticas
Por desgracia, todavía no hay suficiente información sobre cuál es la concentración mínima efectiva. Hay muchas variables implicadas.
Sin embargo, como una guía muy general, los estudios clínicos han demostrado efectos terapéuticos en dosis que van desde 0.5 miligramos a 5 miligramos o más, de hidrógeno al día. Deberíamos poder obtener esta dosis al consumir no más de 1 litro de agua enriquecida con hidrógeno de acuerdo con los estándares IHSA.
“Hacen falta más investigaciones, pero parece ser que, al menos en algunos de estos estudios, una concentración mayor o dosis más alta resulta ser igual de efectiva, y a veces más eficaz, que una cantidad menor”, señala LeBaron.
En cuanto a la vida media, si bebiera agua rica en hidrógeno, alcanzaría un nivel máximo en la sangre y un punto de exhalación en la respiración después de alrededor de 5 a 15 minutos, dependiendo de la dosis.
Esto demuestra que el hidrógeno puede difundirse fácilmente en el torrente sanguíneo para medir los cambios en la respiración. Su nivel de hidrógeno regresa al punto inicial en aproximadamente una hora más o menos.
“También así es como sabemos que el hidrógeno es más parecido a un modulador de señal, porque puede beber agua hidrogenada y esta se eliminará del sistema en una hora, sin embargo, brinda efectos residuales, terapéuticos y de protección que duran horas, días e incluso semanas.
Un estudio pequeño, doble ciego y aleatorizado28 sobre la artritis reumatoide encontró que beber agua rica en hidrógeno era muy eficaz para esta enfermedad… Las personas con artritis reumatoide de inicio prematuro experimentaron remisión de la misma.
Durante el período de suspensión, nadie tomó hidrógeno y aun así continuaron observando mejoras en la enfermedad durante cuatro semanas más…
[La razón de esto es] que se está abordando a la expresión génica.29 Al tomar hidrógeno, en tres días vemos incrementos en la PGC-1α, [que] es biogénesis mitocondrial…
Hay muchos factores de transcripción diferentes en los que opera el hidrógeno, así que, si comenzamos a alterar la expresión del gen, algunos de estos cambios del modulador de la señal pueden ser bastante duraderos, por lo que obtenemos efectos residuales”.
Más información
Para obtener más información sobre el hidrógeno molecular, visite el sitio web del Molecular Hydrogen Institute. Ahí, encontrará investigaciones, video conferencias y muchos otros recursos, incluyendo una serie de diferentes certificaciones para quienes estén interesados en utilizar y administrar hidrógeno molecular.
“Le reitero, somos una organización sin fines de lucro con base científica que trabaja para avanzar en la investigación, aprendizaje y conocimiento del hidrógeno como gas medicinal, por lo que no encontrará productos ni mercancía en nuestro sitio, pero hallará mucha información, y hacemos todo lo posible para brindarle lo último en el área del hidrógeno”, dice LeBaron.
“Espero que consulte ese artículo y revise la información sobre el hidrógeno.
Aunque como investigadores tenemos la responsabilidad de comprender los mecanismos y objetivos moleculares del hidrógeno —así como hacer estudios clínicos al respecto— al ser una molécula tan importante y segura, quizás también sea su responsabilidad compartirlo para que otras personas la conozcan.
Hay tantas personas que no tienen acceso a la atención médica que esto podría ser realmente beneficioso. También hay quienes no tienen acceso a grandes servicios médicos, y el hidrógeno puede ayudar a mitigar los efectos tóxicos”.